27 de Octubre de 2010
Aquí las manos que se juntaron en una plaza, las manos arrugadas, las manos callozas de aguantar banderas, las manos jovenes de la primera vez. Aquí y ahora, para tocarse, para abrazarse, para aguantar anchas y largas colas, para levantarse en puños o en V, para cruzarse en miles de rezos, para escribir Nestor, Cristina, dolor, tristeza, fuerza, militancia. Son las manos de este pueblo Argentino más que nunca profundo y americano.